Saltar a contenido principal Saltar a navegación principal

Uno: Cartas de lectores: ¿Se discrimina a los licenciados en Enfermería?

Señor Director: Los enfermeros constituimos una fuerza humana y profesional de primer orden. En número, sus miembros sobrepasan por lejos a los otros profesionales de la salud.

15 de febrero de 2005.

Nuestras competencias están diversificadas y se nos encuentra en todas las esferas de las actividades relacionadas con la salud: los enfermeros cuidan, educan, dirigen, organizan y también investigan.

Nuestro trabajo actual está marcado por la polivalencia, la flexibilidad y la multidisciplinaridad.

Igualmente estamos llenos de paradojas. Se nos pide desarrollar un espíritu crítico y tener en cuenta la globalización.

Se nos exige competencias técnicas de alto nivel, manteniendo el calor humano y la simplicidad en el contacto.

Además, las condiciones de trabajo tienden a transformarse bajo el efecto del desarrollo tecnológico y de la informatización.

De esta manera se puede decir que: Enfermería es el estudio del cuidado humano, cuidado de todas las vivencias, necesidades y respuestas que la persona tiene alrededor de la búsqueda de su realización, sin desligarse de sus connotaciones individuales y colectivas.

El ejercicio de la Enfermería en nuestra provincia tiene diferentes niveles de formación relacionados directamente con los años de estudio exigidos para cada uno de ellos (auxiliares de Enfermería, enfermeros, licenciados, magíster, doctores).

A partir de la licenciatura se obtiene título de grado académico, con igualdad de formación a la de cualquier otro profesional integrante del equipo de salud. Es precisamente a partir de este nivel que no se encuentra legislada una ley de carrera que permita dar un trato igualitario a las personas que tienen niveles de formación semejante.

La provincia de Mendoza arrastra una deuda histórica con el crecimiento y desarrollo de la profesión. Siempre se ha hecho énfasis en la vocación de servicio, considerándonos un circuito mistificador, en el cual se nos ubica como sublimes privilegiados de nuestra condición. Lo que en realidad representa trabajos interminables, no valorados ni reconocidos como tales.

Como respuesta a esta sublimación, gran parte del personal de enfermería ha terminado su vida laboral con enfermedades que tienen su origen en la sobrecarga ocasionada por el ejercicio de diferentes roles en situaciones estresantes.

En la actualidad, está siendo tratada en la Honorable Cámara de Senadores un proyecto de ley de carrera en Licenciatura en Enfermería, que está siendo demorada en su tratamiento por algunos integrantes del cuerpo y que, con su aprobación en ambas cámaras, permitirá la igualdad de oportunidades entres los profesionales de la salud.

A la vez, dignificará el ejercicio de nuestra profesión.

* Angela Moya DNI 3.911.423, Berta Nora Kotlik, Irene Racca, Blanca Silva, Jorge Michel, Stella Maris Galeano, Mirta Suárez

Contenido relacionado