El acuerdo para concretar este proyecto se rubricará esta semana e involucrará a la Subsecretaría de Relaciones con la Comunidad, la Dirección Penitenciaria, la Dirección General de Escuelas y la Municipalidad de Las Heras.
“Para aquellas que tengan una ejecución de la condena avanzada y deban terminar la escuela secundaria o terciaria, vamos a firmar un convenio con la Universidad del Aconcagua y otro con la UNCuyo, donde irán a cursar”, agregó la funcionaria.
Además, el municipio y el Gobierno buscarán potenciar las habilidades de las presas con talleres y emprendimientos productivos, para que éstas puedan reinsertarse laboralmente luego de pasar su condena tras las rejas. Marroquinería, reciclaje de papel, costura y peluquería, son algunas de las iniciativas concretas.
Respecto de la educación de las internas, Alberto Monetti, director de Participación Comunitaria, afirmó que “el ministro de Justicia y Seguridad (Alfredo Cornejo) nos pidió que avanzáramos lo más rápido posible en el tema”.
El funcionario agregó que existe la posibilidad de que esta medida alcance a aquellas agentes penitenciarias que tampoco hayan concluido alguno de los niveles de educación.
La instrucción, que incluirá a las 16 internas que residen en la Dinaadyf, tendrá características intensivas, aunque aún no se estimó el tiempo de cursado. Será dictada por docentes primarios o secundarios, quienes viajarían a diario hasta el nuevo penal femenino, ubicado en el El Borbollón, Las Heras.
Fortalecer vínculos
Otro de los cambios que el Gobierno busca concretar es el fortalecimiento del vínculo de las presas y sus hijos de hasta 4 años. Se hará a través del programa “Los niños de la cárcel también existen”. Según Monetti, “los chicos podrían extender su estadía junto a sus mamás para que haya un contacto más prolongado”.
