El Gobierno local y la Universidad Nacional de Cuyo firmarán mañana un convenio para poner en marcha el primer laboratorio de ADN en la provincia. Funcionará en la Facultad de Medicina y servirá para agilizar los estudios del ácido desoxirribonucleico en los ámbitos clínico y forense.

La iniciativa surge así para dar respuesta a la creciente demanda que registra Mendoza. Por un lado, acortará el tiempo de espera por parte de la Justicia local en cuanto a estudios para identificación de personas y pruebas de paternidad y, por el otro, ayudará a la Universidad al desarrollo de la investigación sobre enfermedades genéticas y otras pericias.

La decana de la Facultad de Medicina, Norma Magnelli, señaló ayer que el laboratorio comenzará a funcionar “al servicio de toda la comunidad” en los próximos seis meses, cuando la cartera de Justicia y Seguridad concrete la adquisición del costoso equipamiento, cuyo valor ronda los $300 mil.

El convenio entre ambas instituciones establece, en principio, que deberá ser la Universidad quien aporte el personal técnico, mientras que el Gobierno provincial invertirá el dinero para tecnología.

No obstante, aún queda resolver qué organismo financiará el elevado costo de los reactivos, que son las drogas –importadas en su totalidad– que se necesitan para realizar los estudios.

En principio el laboratorio contará con un equipo de seis personas, entre médicos, bioquímicos, técnicos y administrativos. Si bien se prevé la incorporación de más recurso humano en el futuro, el acceso al lugar será posible sólo para estudiantes de posgrado o docentes de la UNCuyo que se especialicen en esta rama de la medicina genética.

“Este es un hecho realmente importante porque Mendoza finalmente podrá autoabastecerse y manejar sus propios tiempos para realizar pericias genéticas. Es un avance para el desarrollo provincial, porque hay cada vez más demanda de estos estudios, no sólo en el ámbito forense, sino también en el médico-clínico”, destacó Magnelli.

Tal como lo adelantó UNO el pasado abril, la incorporación de un laboratorio de ADN permitirá a la UNCuyo cumplir un sueño postergado: obtener muestras mediante elaboración propia, ya que estos estudios han sido históricamente solicitados a la Facultad de Farmacia de la Universidad de Buenos Aires (UBA), y con una espera promedio de 30 días.

* Valeria Caselles / vcaselles@diariouno.net.ar