“La literatura clásica debe enseñarse en las escuelas porque es la base, pero también es cierto que en las bibliotecas escolares faltan libros nuevos que atraigan a los chicos para despertarles el placer por la lectura”, dispara Carolina Flamant, la egresada universitaria 2004 con mejor promedio en toda la provincia.
La joven de 25 años se graduó el año pasado de la UNCuyo con el título de profesora en Lengua y Literatura, y con un promedio soñado por más de un padre: 9.80. Esto le valió ayer el máximo reconocimiento anual que otorga la Federación Argentina de Mujeres Universitarias (FAMU), a través de una medalla con la insignia de esa institución.
Pese a sus notas sobresalientes, Carolina no fue lo que dice “un ratón de biblioteca”. En los últimos tres años combinó sus estudios con la docencia en escuelas secundarias. Pese al difícil panorama que hoy viven los docentes, asegura esta joven oriunda de San Martín que su sueño es “seguir dando clases por mucho más tiempo”.
“Toda mi educación formal la hice en el sistema público –agrega– y quiero devolver todo lo que aprendí a través de la docencia. Es más, los alumnos del colegio público valoran mucho lo que un profesor les entrega. Será porque todo les cuesta mucho más”.
“Nunca desaprobé ni siquiera un parcial porque la universidad fue siempre una prioridad para mí. Aunque sí quise dedicarme también a dar clases porque la docencia es un trabajo que me gusta mucho”, destaca.
Lejos de animarse a escribir, la profesora de Lengua y Literatura dice que jamás se animó a plasmar en un papel una poesía o un cuento, sino que su vocación por las letras se limita a la lectura voraz. “La escritura es para aquellos que nacen con el don. Yo no lo tengo, pero igual disfruto mucho leyendo a los dotados”.
Además de Carolina, otras 70 universitarias de las más diversas disciplinas y universidades que obtuvieron el mejor promedio en la promoción 2004 recibieron su diploma recordatorio de la FAMU.
Esta organización no gubernamental y sin fines de lucro funciona en Mendoza desde 1956 y está integrada por asociaciones de todo el país. Además, es miembro de la Federación Internacional de Mujeres Universitarias.
Sus objetivos centrales son: crear vínculos de solidaridad entre las egresadas, estimularlas al estudio, la investigación científica y su formación humana, a través de capacitación y actividades de postgrado.
* Valeria Caselles / vcaselles@diariouno.net.ar