Para realizar estos objetivos, Montero sacó a relucir una extensa lista de programas que ya se están instrumentando y que habrá que esperar a que concluyan para conocer si tuvieron o no el resultado esperado.
En relación con el apoyo a los sectores productivos y a la diversificación de las actividades económicas, la ministro mencionó el destino que tendrán los U$S70 millones que llegarán desde el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Destacó la labor que se está haciendo desde el Instituto de Desarrollo Industrial y Tecnológico (IDITS) y el Instituto de Desarrollo Rural (IDR) para capacitar y cubrir el déficit de recursos humanos que sufren distintos sectores. En ese sentido, se destacó los 850 operarios ya formados para el sector metalmecánico y los más de 2.800 cosechados que se capacitaron desde el IDR.
También se rescató el rol que tendrá el Fondo para la Transformación y el Crecimiento ahora que ya tiene $100 millones para dar en créditos y en el futuro donde se espera que se amplíe el dinero disponible para ofrecer financiamiento.