Los funcionarios del Gobierno que impulsan este método festejaron que 5.022 personas participaran de la experiencia. Y que el 96,14% esté dispuesto a utilizarla en las próximas elecciones. La oportunidad para experimentar la dio la elección de la reina de la Nieve, que se hizo en Malargüe el sábado a la noche. La primera experiencia había sido en marzo, para la Fiesta Nacional de la Vendimia, cuando los votantes seleccionaron tres atributos de las reinas: los ojos más lindos, la sonrisa más compradora y la expresión más dulce. El Gobierno ya manifestó públicamente que espera aplicar el sistema en una comuna –como mínimo– en las legislativas que se harían en setiembre u octubre del 2005. Y un dato alentador es que al 99,42% de las personas que votaron en los 18 departamentos le resultó fácil cumplir con la operación. Claro está, no es lo mismo tener que elegir a una sola persona entre 17 reinas que optar por varios candidatos repartidos en por lo menos siete cuerpos de una boleta, según la elección. Pero el uso del sistema posibilita, por ejemplo, ahorrar elementos como papel y un recuento mucho más rápido. El del sábado demoró apenas 20 minutos. Las urnas electrónicas que se habilitaron para elegir a la reina provincial de la Nieve fueron 20. El sábado desde las 10 y hasta las 14 se pudo votar en la Subsecretaría de Turismo, en Ciudad, y en las municipalidades de Las Heras, Santa Rosa y San Rafael. Y hasta las 22, en el Mendoza Plaza Shopping, Palmares Open Mall y el hipermercado Jumbo. También, de 20 a 23, en el polideportivo de Malargüe. El escrutinio se realizó a partir de las 22 en el Huentala Hotel Boutique del centro capitalino y finalizó casi dos horas más tarde, cuando cerraron las urnas en Malargüe. Mientras que en el departamento sureño reconocidas modelos, políticos, empresarios y público en general disfrutaban de la fiesta, en el hotel se encontraba un grupo de técnicos de la empresa española Indra, una de las firmas que pretende hacer negocio en Mendoza. Además estuvieron el ministro de Gobierno, Alfredo Cornejo, y el secretario administrativo, legal y técnico de la Gobernación, Claudio Romano, uno de los mayores impulsores del voto electrónico que tiene el oficialismo. “En el hotel está instalado el cerebro de la votación electrónica que se ha realizado, que es el centro de cómputos. Y funcionó de esta manera: las personas interesadas en participar se acreditaban y vía telefónica se transmitían eso datos a este centro de cómputos, donde están los padrones y desde donde autorizaban a votar. Y también donde cada votante era bloqueado automáticamente para que no pudiera hacer la operación en otro lugar”, detalló Romano. El funcionario también aclaró que si se trataba de un joven mendocino mayor de 18 años que no aparecía en los padrones, el sistema le permitía cargar sus datos y los sumaba al resto. Este método le posibilitó al Gobierno obtener un registro de incidencias al momento. Esto es, uno por uno, los votantes y el lugar en que estaban efectuando la elección, la cantidad de electores y un monitoreo permanente de las conexiones físicas y lógicas.
Un brindis por los 5.022 electores
Paso a paso, cómo funcionó el recuento de votos: 4 A las 22 cerraron la mayoría de las urnas habilitadas y esos datos llegaron al centro de cómputos que estaba instalado en un hotel del centro capitalino. 4 La última que cerró fue la de Malargüe, a las 23.30, cuando terminó el espectáculo artístico de la Fiesta de la Nieve. 4 Quince minutos antes, en medio de un ágape que se ofreció para hacer más placentera la espera, Claudio Romano brindó con los presentes porque ya se habían superado los 5.000 electores. 4 A las 23.50 comenzó a proyectarse, en una gran pantalla ubicada en un auditorio del hotel, el resultado de la elección, ordenando alfabéticamente los departamentos. Esto se hacía en espejo con la Fiesta de la Nieve en Malargüe.
Auditores: para evaluar la experiencia, el Gobierno local armó una comisión con profesionales del CFI, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, una consultora privada y la facultad de Ciencias Políticas de la UNCuyo.