Aunque está casi todo prácticamente listo. Sólo falta firmar los convenios con los profesionales que dictarán los cursos prácticos a la ciudadanía, aprobar el presupuesto de unos $30 mil para su puesta en marcha e imprimir la folletería educativa.

La propuesta cuenta además con la participación del Instituto Regional de Estudios y Energía de la Universidad Tecnológica, las empresas privatizadas, los entes reguladores y los 18 municipios.

Para reforzar sus mensajes, se apelará a publicidad a través de los medios de comunicación, que serán solventados por el Gobierno provincial. El puntapié inicial se dará en Capital pero la campaña recorrerá cada uno de los departamentos de Mendoza.

“Aún no tiene fecha de culminación porque se busca que perdure en el tiempo, como una herramienta más de concientización”, sostuvo ayer Sergio Marinelli, subsecretario de Servicios Públicos.

La exposición de la temática se dividirá en tres módulos: electricidad, gas y agua. Al mismo tiempo, se contará con dos mesas didácticas, donde cuatro especialistas –dos de Prodelco y dos de la UTN– enseñarán cómo utilizar los servicios.

Para ello se emplearán diversos electrodomésticos para demostrar cuánto gasta cada uno y “cuánto dinero se puede ahorrar sin disminuir la calidad de vida”, indicó Marta Rizzo, la titular de Protección de Defensa al Consumidor.

También se darán explicaciones sobre cómo leer las facturas, cómo funcionan los medidores eléctricos, dónde hacer un reclamo, qué artefacto conviene comprar para una familia tipo, entre otras cosas.

Además se tratará de desmitificar algunas conductas hogareñas que juegan en contra del bolsillo. Como por ejemplo, aquellos que emplean la televisión como radio y desconocen que ésta consume 20 veces más de energía.

Otro caso sucede con la instalación de los termotanques en el exterior, “lo que genera 35% más de gasto que si estuviera adentro de la vivienda”, comentó Rizzo, quien hizo un seminario en Israel sobre la utilización del recurso hídrico. De allí surgió la idea de ampliar esos conocimientos al resto de los servicios.

Si se obtienen los resultados esperados, los mendocinos podrían ahorrar cerca de $10 millones en electricidad por año, una cifra no determinada pero igual de sorprendente en gas y aprender a cuidar el agua basados en un concepto de solidaridad, estiman los organizadores.