En Mendoza existe la ley provincial antitabaco (la Nº 5.374/88) y varias ordenanzas municipales que prohíben fumar en espacios públicos y edificios estatales. Sin embargo, hasta ahora no hay ninguna entidad oficial encargada de controlar o multar a los transgresores, como tampoco los juzgados civiles registran denuncias por ese delito.
 
La ley provincial, que está vigente desde 1988, establece una multa de $15 contra quien fuma en espacios compartidos por no fumadores. Incluso pone a disposición juzgados civiles y comerciales de toda la provincia para que los particulares asienten sus denuncias contra los infractores.
 
Ambas formas de aplicación de la ley brillan por su ausencia, pues en un relevamiento por casi diez juzgados no existen denuncias y la cartera de Salud no registra multas hacia particulares o instituciones que no cumplen con la ley.
 
No obstante, para el Gobierno la situación es considerada “esperable” por dos razones. Por un lado, no hay infraestructura suficiente para fiscalizar en cada edificio público si se cumple o no la norma. Por el otro, la ley 5.374/88 no estable un ente de control específico con poder de policía para cumplir tamaña tarea, ya que la fiscalización se reparte entre la fuerza policial, municipios y cartera de Salud de manera indistinta.
 
Así las cosas, la Subsecretaría de Planificación y Promoción para la Salud, repartición promotora de la lucha antitabáquica, ha decidido crear mayor conciencia social y no prometer duros castigos contra los infractores. Por ello es que para hoy, Día Mundial sin Tabaco, y durante toda esta semana, el Gobierno distribuirá 50 mil folletines en entidades públicas y privadas con información sobre las consecuencias del cigarrillo y una guía para dejar de fumar. (Ver aparte.)
 
Claudia García, subsecretaria de ese área, admitió ayer: “Es imposible hacer cumplir esta ley porque no hay un comando especial del Estado para detectar a fumadores in fraganti. Además, no es muy efectivo el castigo monetario. Creo que el tema pasa por tomar conciencia de que el cigarrillo hace daño, al mismo tiempo que hacer valer nuestros derechos a respirar aire puro. En esta instancia hemos avanzado mucho en Mendoza”.
 
En este sentido, hay casi un centenar de empresas y organizaciones sociales que se han manifestado “libres de humo” en los últimos siete meses, cuando se puso en marcha la convocatoria promovida por el Ministerio de Salud.
 
Sin embargo, aún se registra que el 40 % de la población mendocina es adicta al cigarrillo –según cifras oficiales– al mismo tiempo que en muchos espacios públicos (Casa de Gobierno, tribunales, algunos hospitales, entre otros) la norma sigue siendo una mera decoración. “Si hay reparticiones en donde los funcionarios públicos fuman, tampoco podemos hacer mucho”, concluyó García.
Valeria Caselles vcaselles@diariouno.net.ar  
 
El Día Mundial sin Tabaco
 
(...) El DAMSU, la obra social de la UNCuyo, celebrará hoy un acto a las 11 en la entrada de sus oficinas (ciudad universitaria) para hacer público el compromiso de acreditarse como institución libre de tabaco. Esta obra social será pionera en esa universidad. Por ello invita al resto de las unidades académicas y administrativas a iniciar este camino como un aporte más a la salud de los trabajadores universitarios.