De hecho, el dirigente gremial Víctor Yanzón dijo ayer que para ellos eso representa un acercamiento. “El vicerrector Arturo Somoza nos ha pedido una nota para que ellos vean qué es lo que estamos reclamando concretamente”, explicó. El escrito tendrá dos puntos: el pedido de $300 de paliativo, por única vez, y la discusión de los días no trabajados.
Mañana, las autoridades de la universidad se reunirán con los decanos de las facultades para analizar el escrito. Esa es la razón por la cual Yanzón estimó que al mediodía ya podrán tener una respuesta, que en caso de ser positiva servirá para levantar las medidas de fuerza.
Por su parte, los docentes cumplieron ayer la segunda jornada de paro con acatamiento dispar. Para la universidad, hubo mayor presentismo en los colegios y se mantuvo la inasistencia en las facultades más combativas. Para el gremio, la situación fue distinta.
Carmelo Cortese, secretario general de FADIUNC (el gremio que nuclea a docentes universitarios y secundarios de la UNCuyo), afirmó anoche: “Los números del paro son similares a los de ayer (por el miércoles). Por ejemplo, en la Facultad de Odontología el acatamiento subió; Ciencias Económicas ayer paró y hoy (por ayer) no; tampoco lo hizo Ingeniería; en Agrarias hubo un 50% de adhesión y en Educación, entre el 60 y el 70%, mientras que en los colegios sigue siendo alta. A pesar de las presiones, amenazas e intimidaciones, el paro ha sido bueno”.
“Es obvio que el descuento de los días de paro surte efecto, por eso insistimos con que es un arma que tiene el patrón para hacer caer la protesta. Si pedimos aumento es porque no nos alcanza y lo que hacen es descontarnos. Los docentes están tan cansados de los sueldos miserables que siguen reclamando”, agregó.
Los profesores tuvieron ayer una asamblea en la que confirmaron el paro de 72 horas que se realizará después de Semana Santa, del 19 hasta el 21. El primer día habrá otra asamblea pero frente al Rectorado.
Cintia Vargas info@diariouno.net.ar