Julio Cobos ha dispuesto poner la lupa en cuánto, cómo y en qué se gastó la plata que se destinó a reparaciones en edificios escolares.
Esto se hará al mismo tiempo que se intenta solucionar el déficit de gestión por el cual siguen habiendo escuelas sin gas y sin clases.
Para eso le encargó a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) una auditoría externa, técnica y contable sobre las inversiones hechas desde el 2004 hasta este mes del 2006.
La auditoría abarcará toda la provincia y surgió desde la propia Dirección General de Escuelas (DGE), convenida entre el subsecretario de Administración, Flavio Arjona, y el director de Recursos Físicos, Víctor Aguado.
Uno de los objetivos es conocer la calidad de las obras efectuadas para compararlas con los registros que posee la DGE (auditorías internas) y la información que obtienen desde los municipios a los cuales se les descentralizaron recursos para hacer arreglos en las escuelas.
“Queremos saber si esos fondos llegaron, adónde y cómo lo hicieron, y qué obras se ejecutaron”, afirmó Aguado, aunque negó que estén dudando del manejo comunal de esa plata.
Ahora bien, ésta no es la única razón que esgrimió el funcionario cuando se lo consultó sobre la auditoría. También mencionó que quieren contar aunque sea con una parte de esa información a fin de este mes, cuando la titular de la DGE, Emma Cunietti, comparezca ante el Senado por los problemas que hay con el gas en las escuelas.
Esa reunión está prevista para el 31; faltan solamente nueve días y Cunietti enfrenta rumores sobre su posible alejamiento de la DGE a consecuencia de la disconformidad que habría con su trabajo en el Ejecutivo, si bien se le reconocen avances en lo educacional propiamente dicho.
Con esto también tiene que ver otro de los aspectos al que se apunta con esta auditoría, que es evitar que aparezcan irregularidades en torno a las contrataciones directas que se hicieron para las mejoras.
La auditoría, según Aguado, demandaría unos tres meses de trabajo y priorizaría las escuelas para las cuales se destinó mayor cantidad de dinero.
Cobos, al frente
A fines de abril, el gobernador Cobos se puso al frente del problema de la falta de gas en las escuelas. Juntó a medio centenar de personas –entre ingenieros, funcionarios y otros técnicos– para cambiar la situación, al tiempo que admitió que la situación se debía a errores de gestión.
A esta acción del gobernador la precedieron las protestas estudiantiles por los problemas con la calefacción en 240 establecimientos de la provincia y críticas provenientes de la Legislatura que persisten frente a que también no cesan estos inconvenientes.
Sin solución
Por no tener gas en su edificio, el viernes, unos 50 alumnos de la escuela General Las Heras cortaron las calles Montecaseros y Alberdi, donde está ubicado ese establecimiento, y más tarde el enojo desembocó en la explanada de Casa de Gobierno, donde realizaron una manifestación.
Ahí los recibieron dos funcionarias de la DGE, María del Carmen Sánchez y Sandra Castro, quienes les dijeron que el problema es atendido.
Un día después, el sábado, trascendió públicamente que un grupo de docentes de General Alvear denunciarán a la DGE ante la Subsecretaría de Trabajo por “inacción y negligencia” y que una escuela suspenderá las clases por 20 días por falta de gas.
Se trata de la escuela Carlos María de Alvear, una de las más importantes de ese departamento sureño, a la que asisten 800 alumnos.
Delia Segura dsegura@diariouno.net.ar
La UNCUYO invita al foro de urbanismo para repensar una ciudad integral y sostenible
27 de noviembre de 2024