Junto con la investigación, que se dividirá en etapas y demandará un plazo de diez meses, se diseñará y construirá una base actualizada del sector. El trabajo será una herramienta para las decisiones de los empresarios y la implementación de políticas públicas. Informaron los investigadores que el punto inicial del estudio será precisamente la confección de la base de datos, que recopile la información existente acerca de la actividad. En esa primera etapa, a la par, se analizará el contexto internacional para ver la relevancia de la industria vitivinícola en el mundo, con variables como superficie implantada con viñedos, producción de uva, elaboración de vinos y mostos, consumo de vinos y comercio mundial. El proceso agrícola será visto en una segunda etapa.
Consiste en el análisis de todos los factores que inciden en aquel eslabón. Algunas de las variables que se analizarán son: distribución de la propiedad, personal empleado, costos, innovación tecnológica y estructura de mercados, entre otras. Según la información del Fondo Vitivinícola, el análisis de los procesos industriales será otro de los pasos a darse para conocer características y costos de los productos finales, compararlos con las exigencias de mercado y determinar el impacto socioeconómico. La última etapa comprenderá el estudio de los procesos de comercialización y distribución, lo que permitirá evaluar las repercusiones del sector comercial. Se analizarán factores como demanda final, poder de mercado, estrategias, grandes distribuidores, minoristas y regulaciones.