Entre otros aspectos, la medición abarcó la floración, crecimiento de brotes por longitud, número de nudos, cuaje –en cuanto a intensidad y evolución– y otros. Luego, se efectuó, en relación con la productividad de los viñedos, el recuento del número de racimos por unidad de superficie, porcentaje de racimos enfermos, corridos o malformados y hasta el número de granos por racimo, con el consiguiente crecimiento por peso y por tenor azucarino. La gerente general del IDR, Mariel Vanín, expresó que “las bodegas participaron haciendo una serie de mediciones durante toda la temporada hasta la cosecha. Por su parte el IDR, en el inicio de la campaña, efectuó la capacitación correspondiente”. La información se encuentra disponible en el sitio web del IDR donde están los datos generales y los promedios. Cada uno de los establecimientos participantes en este sistema tiene un password para sus datos particulares.
La gerente técnica del IDR, Flavia Gil, señaló que “lo más importante es que podemos obtener resultados y comparar el comportamiento de distintas zonas”. El gerente de Bodegas de Argentina, Juan Carlos Pina, destacó la labor de la Red de Datos Vitícola. Sostuvo que es “información que suma a la hora de que los profesionales tengan que tomar decisiones respecto de los cultivos; también que realicen el manejo de éstos con fundamentos técnicos”. De esta forma se pueden modificar técnicas de poda, de riego, por ejemplo.