Los rectores de la Universidad Nacional de Cuyo y de Congreso, María Victoria Gómez de Erice y Daniel Pereyra, expusieron acerca del tema, bajo la coordinación de la titular de FAVIM, Irma Kitita Salinas de Neme.
Las crecientes dificultades para que se inserten los graduados en las empresas surgieron en los discursos, que fueron seguidos por la directora general de Escuelas, Emma Cunietti, y el empresario Orlando Terranova, del Consejo de Administración de la Universidad de Congreso, entre otros asistentes. Los invitados formularon preguntas o dieron sus puntos de vista al finalizar el encuentro. En general se coincidió con la escasa atención que la sociedad le da a la educación en la Argentina.
Gómez de Erice centró su discurso en el rol universitario actual.
Expresó que la Universidad “puede trabajar técnicamente” pero lo que “tiene que desarrollar son competencias básicas. No se puede preparar para cada cosa puntualmente”, manifestó. Es decir, hay que lograr un egresado que “tenga flexibilidad para adaptarse a las distintas problemáticas que se van presentando”. Apuntó que “nadie puede enseñar todos los casos y situaciones que se puedan producir”. Agregó que “la formación técnica, que es muy importante para desempeñarse en cualquier rol, es inútil si no se acompaña con competencias básicas, como es resolución de problemas, comprensión lectora, producir un buen texto y ser una persona culta, que conoce el mundo y lo que pasa en él. Sin todo esto es inútil. Podemos mejorar lo técnico pero no vamos a mejorar el desempeño”, insistió.
Pereyra sostuvo que la vinculación universitaria con “el mundo de las empresas es algo que hay que trabajar mucho porque es mucho lo pendiente”. Dijo que se debe generar en los jóvenes “el concepto de formación de riqueza y de empleo” y que para ello deben trabajar en forma conjunta el sector productivo y la universidad.
El rector de la Universidad de Congreso expresó finalmente que es muy poco lo que se habla en la Argentina y en nuestra provincia de “la problemática universidad-empresa” y que “el solo hecho de discutir la temática”, como ocurrió en el encuentro de FAVIM, es “un paso adelante”.
