Hace una década que Pamela González integra el cuerpo estable del Ballet de la UNCuyo, y esta noche abandona las zapatillas de punta para debutar como coreógrafa en la obra de su autoría, Divertimento.
Se trata de la última función del año que dará el ballet universitario dirigido por Héctor Cavallini. Y Pamela lo vive con muchas expectativas personales ya que no es habitual en este cuerpo de baile recrear coreografías locales. Aunque confiesa que no quiere cambiar la danza por la función coreográfica.
El programa de Divertimento está integrado por Variaciones de varones sobre El Quijote y El torero de Carmen, cuadro masculino atípico en la provincia, que interpretarán tres bailarines mendocinos invitados, discípulos de Cavallini. Ellos son los seleccionados para la beca de la Fundación Julio Bocca: Lautaro Dolz, Martín Vedia y Jonathan Luján.
A esto le seguirán las dos piezas creadas por Pamela González: ¿Qué hago con mis manos?, protagonizado por la bailarina Analía Iacopini, y Acto primo, de corte neoclásico.
“La obra de las manos la creé cuando tuve una rotura de ligamento. Entonces, en la cama, empecé a pensar en una coreografía con el impulso de los brazos”, cuenta la bailarina. Este cuadro es de corta duración y se acompaña con una polca de Strauss.
En cambio, Acto primo la compuso exclusivamente para esta presentación del ballet, con todos sus integrantes en escena. “Me regalaron una música de Mozart y Los Beatles tocada con instrumentos del siglo XVIII, que fue muy inspiradora para mí”, cuenta la ahora coreógrafa.
Sin argumento, esta obra está integrada por tres movimientos: allegro, adagio y allegro. Y su estilo es neoclásico, a diferencia de ¿Qué hago con mis manos?, que es contemporáneo.
A este programa el ballet le suma una Suite de tango, repertorio compuesto por obras tangueras y folclore de proyección, con música de varios autores y coreografía de Mario Morales y Mauricio de la Cruz, ambos también integrantes del ballet.
González dice que su creación parte de la música y del propio aporte de cada bailarín. “Son mis compañeros, conozco bien las cualidades de cada uno y trato de resaltar esas virtudes”, remarca.
La bailarina agradece la oportunidad que “me dio el maestro Cavallini de estrenar mis coreografías; esta es una nueva etapa del ballet”, sostiene.
Carolina Baroffio uno_escenario@diariouno.net.ar