La concejala Paola Rodríguez (PD) explicó ayer a UNO que la principal causa de infección se encuentra en las pelotitas con que juegan los chicos todos los días: “Es muy engorroso limpiar todas las pelotas e incluso muchos propietarios no saben cómo hacerlo. Aunque no haya peligro de muerte, siempre puede andar un virus dando vueltas y transmitirse en un lugar que comparten los chicos”. Por este motivo, una de las medidas de la ordenanza es que cada local habilitado realice desinfecciones cada 30 días –como mínimo– y que esa tarea sea controlada a través de inspecciones municipales. Otro problema sanitario que existe en estos espacios de esparcimiento es la falta de infraestructura para la cocción de los alimentos. Sobre este punto existe un capítulo dentro de la norma que impone el mantenimiento de la cadena de frío, la higiene de utensilios y del material descartable para los alimentos, además de otros ítems que exige el Código Alimentario Argentino.
La ordenanza lujanina, hasta ahora pionera en la provincia, también contempla la puesta en marcha de un relevamiento total de los locales habilitados dentro del rubro comercial. Según han comprobado los ediles autores del proyecto, actualmente son varios los peloteros funcionando que han sido inscriptos en el Municipio con la figura legal de jardines maternales o guarderías. “Este es otro problema porque no todos están inscriptos en el rubro comercial, ya que las tasas municipales son más costosas. Por eso no tenemos una cifra precisa acerca de cuántos peloteros reales hay funcionando en Luján. Primero se realizará un relevamiento y luego comenzaremos con la tarea de inspección de los locales”, añadió Rodríguez. Otro de los puntos que establece la ordenanza es el vinculado a la seguridad edilicia. Fija como capacidad máxima en cualquiera de estos establecimientos una persona por metro cuadrado.También se inspeccionará el mantenimiento de los juegos no mecánicos y las ampliaciones o modificaciones en esa área deberán ser autorizadas. Para la inédita misión, los inspectores municipales se capacitarán con bromatólogos de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNCuyo.