Un cedro viejo y seco de la plaza Independencia luce desde ayer una cinta celeste y blanca y un crespón, símbolo del mal estado en el que se encuentra el arbolado público de la provincia. Se lo colocaron miembros de la Asociación Preservación del Arbol y su Ambiente, en un acto simbólico que realizaron en el sector que está en Mitre y Rivadavia.
Esta asociación prácticamente había dejado de funcionar y volvió a tomar impulso este año, después de que la rama de un árbol mató a una mujer en calle San Lorenzo y saltó la alerta.
Especialistas del Cricyt, el Colegio de Arquitectos, la Facultad de Ciencias Agrarias, el Iscamén, fundaciones ambientalistas y privados forman parte de esta asociación.
Su objetivo es concientizar a la población acerca de la problemática e instar al mismo tiempo a los gobiernos municipales y provincial a darle una solución definitiva y económicamente viable.
Por eso hace ocho días hicieron una presentación ante la Fiscalía de Estado firmada por 500 especialistas, insistiendo en la necesidad de que el Gobierno tome cartas en el asunto, pero también con un diagnóstico y una serie de propuestas.
El reclamo también llegó a la Dirección Provincial de Vialidad y al Departamento General de Irrigación.
“La razón de todo esto es que nosotros tomamos a los árboles como un servicio para la salud”, explicó ayer el ingeniero agrónomo Salvador Micali, una de las personas que destacaron aspectos que van en desmedro del manteniendo del arbolado, por ejemplo: incorrecta elección de especies y riego, reforestación con especies que no son las adecuadas y falta de conocimiento por parte de las personas encargadas del cuidado de los árboles.