El prestigioso doctor en Psicología Mario Carretero llegará a Mendoza el próximo lunes para dar una conferencia sobre “El aprendizaje en la sociedad del conocimiento”, invitado especialmente por el Colegio Norbridge.
Este lúcido investigador español, uno de los más leídos, tiene un extenso currículum como investigador de los problemas del aprendizaje, la importancia de los saberes previos y la motivación de los alumnos.
Su trabajo se orientó hacia la labor con profesores y podría decirse que su obsesión es la pasión con la que se transmite un conocimiento. “Suelo decir que las mujeres cocinan mejor cuando están enamoradas. Larga materia para discutir, pero quizás no quepa duda de que se enseñan mejor las cuestiones sociales cuando se tiene el goce por su propio e intrigante contenido”, señaló en uno de sus artículos de divulgación publicado www.mariocarretero.net , página de la Universidad Autónoma de Madrid.
 
El interés de los alumnos
Para Carretero “es importante que el alumno perciba que la construcción de conocimiento es algo que se hace tomándolo en cuenta a él y a sus intereses”, aunque agrega: “Esto no quiere decir que tengamos que partir sólo del interés del alumno”.
Luego indica que la tarea del maestro está en ir vinculando los intereses del alumno, muy próximos a lo cotidiano y muy alejados de las materias, con los problemas que plantea su disciplina. “Eso sí, no nos engañemos, éste es un trabajo muy difícil; pero es el desafío hermoso de ser profesor”, señala el estudioso.
Categórico, este investigador de la Universidad Autónoma de Madrid afirma que “el tipo de cultura académica y escolar que ofrece la secundaria choca con las culturas juveniles, cuyos códigos rechazan una parte muy importante de su academicismo, de su énfasis desmedido en los contenidos”.
 
La enseñanza de la historia
A lo largo de su carrera académica, Carretero se ha interesado particularmente por la enseñanza de la Historia en las escuelas.
Sobre este punto, el catedrático afirma que “en muchos países, la enseñanza de la Historia es considerada verbalista y un tanto aburrida para los alumnos de distintas edades. Por otro lado, también se suele considerar que la asimilación de sus contenidos no requieren razonamiento u otras habilidades cognitivas complejas, sino solamente memorización rutinaria y actividades repetitivas”.
La manera o el formato didáctico en que se expone la Historia es la clave para que esto no suceda según la óptica de Carretero.
“Los alumnos suelen considerar Historia una materia aburrida y demasiado repleta de detalles irrelevantes (fechas, batallas, nombres de gobernantes…) y los profesores no suelen hacer demasiado hincapié en la complejidad disciplinar de sus contenidos ni abundan las visiones renovadoras y críticas de la didáctica de esta materia”, señala.
Según este especialista, es diferente lo que sucede con los alumnos cuando se enseña el tema de los héroes. Los chicos, asegura, agradecen esa enseñanza “en medio de la sequedad de los contenidos escolares y responden a su vez con la identificación. Por eso dicha enseñanza es tan efectiva. Es muy probable que no conozcan bien la raíz cuadrada, la evolución de las especies o simplemente las capitales de las provincias, pero todos ellos saben y sienten quienes son San Martín, Belgrano, Sarmiento y compañía. Por el contrario, la enseñanza de la Historia, en el sentido académico del término, posee una densidad informática mucho mayor y eso la hace menos diáfana para la mente”.