La Escuela comenzó a desarrollarse en el 2010 a partir de un trabajo de diagnóstico en comunidades campesinas indígenas sobre la problemática de acceso a la educación en el campo. Ubicada en el departamento de Lavalle, 70 km al noroeste de la Ciudad de Mendoza y a 20 km de la villa cabecera Villa Tulumaya, el establecimiento lleva cinco años con reconocimiento de la Dirección General de Escuelas de la Provincia.
“Las principales problemáticas que se encontraron, en el diagnóstico que realizamos, refieren al desarraigo de los jóvenes y adultos que pretenden estudiar que los desvincula de su vida, y la oferta educativa que no tenía relación con los procesos productivos de las actividades de las comunidades” comentó Marta Lía Greco, directora pedagógica de la escuela y agregó “Además resultaba necesario incorporar tecnología adecuada en las producciones agropecuarias que respeten y recuperen las prácticas y sabiduría campesina”
A partir de este proceso se construyó la dinámica de la Escuela Campesina de Agroecología, cuyo formato es de una semana de estudio y trabajo en el establecimiento al que se llama “Tiempo Escuela” y tres semanas de estudio y trabajo en el campo al que se denomina “Tiempo Comunidad”, donde se continúa con la escuela en las comunidades a través de material mediatizado de apoyo y trabajo prácticos en las parcelas propias de los estudiantes. Durante este tiempo cuentan con módulos pedagógicos de profundización y consolidación de los temas abordados durante el “tiempo de escuela”.
En la Escuela, entre otras actividades, se realizan talleres productivos agroecológicos de chacra, producción pecuaria, apicultura, producción de plantas aromáticas y medicinales, producción de bíoinsumos y agroindustria.
El monto obtenido cercano a los $100 mil pesos, será utilizado para la compra de insumos, herramientas y maquinarias agrícolas y de agroindustria, capacitaciones y para la construcción de “la casa de Semillas”, con la intención de profundizar el proceso de recuperación, conservación y multiplicación de las semillas criollas de toda la provincia, como base de la sostenibilidad y la independencia productiva.
“La convocatoria nos llegó a través de la UNCUYO, pudimos formular la propuesta, que tiene la intencionalidad de fortalecer los procesos productivos y pedagógicos, buscando recuperar y enamorar a los jóvenes adultos de los procesos productivos” expresó Greco y agregó “Para nuestra organización es estratégico vincularnos con la Universidad para en conjunto construir nuevos conocimientos a partir del diálogo.”
El Área de Financiamiento de Proyectos de la Secretaría de Desarrollo cumple un rol fundamental en este proceso difundiendo las distintas convocatorias, ya sea nacionales e internacionales y asesorando y vinculando a los distintos proyectos para su futura presentación a la línea deseada.
Más información financiamiento@uncu.edu.ar